En una consulta psicológica, donde se puede ver a un hombre sentado en un sofá, con la mirada perdida y los hombros caídos, claramente abrumado por la tristeza. La iluminación tenue y los colores fríos refuerzan la sensación de melancolía que rodea al paciente. El hombre parece sumido en sus pensamientos, evidenciando un profundo dolor emocional por una reciente ruptura amorosa.